La DJ Yesong , quien alguna vez fue una querida Idol del K-Pop, una vez más ha sido noticia luego del trágico incidente que causó mientras conducía bajo los efectos del alcohol .
Actualmente está siendo juzgada por la grave infracción de las normas de tránsito que provocó la muerte de un repartidor. El caso de DJ Yesong provocó la indignación pública, que se ha intensificado tras la cuestionable forma que eligió para defenderse.
Yesong enfrentó cargos después de su participación en un accidente nocturno que resultó en la muerte de un repartidor de unos 50 años. El accidente, ocurrido la mañana del 3 de febrero en Seúl, ha suscitado duras críticas debido al nivel de alcohol en sangre de Yesong, que se situó en el 0,221%, superando con creces el límite legal.
El argumento de la defensa gira en torno a un punto de discordia relacionado con el trazado de la carretera y la ubicación de la víctima. Sugirieron que el trágico resultado podría haberse evitado si la víctima hubiera respetado las normas de tráfico relativas al uso del carril para motocicletas.
Esta línea de razonamiento sólo ha alimentado la ira pública, especialmente a la luz de la excusa que Yeseong proporcionó para su intoxicación: las presiones de la vida de las celebridades que requieren la asistencia a un evento para beber.
"Siendo una celebridad, le pidieron que asistiera a una sesión de bebida con gente de la radiodifusión..."
— Equipo de DJ Yesong
En refutación, los fiscales han destacado la evidencia de las imágenes de la cámara del tablero, que muestran claramente la incapacidad de DJ Yeseong para controlar su vehículo, lo que socava cualquier afirmación sobre su competencia para conducir en el momento del incidente. Para complicar aún más la situación de Yesong está la sospecha de su participación en otro atropello y fuga apenas minutos antes del accidente fatal.
Los internautas indignados han acudido a foros populares como FM Korea para condenar las acciones de la estrella.
El juicio de DJ Yesong sigue atrayendo la atención, ya que muchos esperan justicia para la víctima y un mensaje claro contra la conducción en estado de ebriedad.