Una tendencia alimentaria reciente en Japón ha llamado la atención por su enfoque poco convencional para hacer Onigiri, o bolas de arroz. En lugar del método tradicional de dar forma a las manos, algunos chefs jóvenes utilizan sus axilas para amasar y moldear estos bocadillos icónicos.
Este método único, que ha ganado popularidad en las redes sociales, ha añadido un nuevo giro a la cultura gastronómica japonesa. Según el South China Morning Post , todos los ingredientes y partes del cuerpo que entran en contacto con los alimentos se someten a una minuciosa desinfección antes de comenzar el proceso.
Es uno de los snacks más antiguos de Japón, rellena con una deliciosa combinación de verduras y carne, la bola de arroz suele tener forma manual y envolverse en una capa de algas.
Las bolas de arroz onigiri ya existían incluso antes de que los samuráis las llevaran al campo de batalla.
Hoy en día, este refrigerio centenario ha adquirido una forma nueva y extraña.
La merienda ahora la preparan mujeres jóvenes que usan sus axilas para darles forma a las bolitas, un extraño giro culinario que se ha vuelto viral en las redes sociales.
Antes de elaborar el onigiri se desinfectan todos los ingredientes y las partes del cuerpo con las que entran en contacto, luego, las chicas hacen ejercicio para producir sudor y usan las axilas en lugar de las palmas para amasar y dar forma a las bolas de arroz, el producto terminado se vende luego a precios elevados en algunos restaurantes, hasta 10 veces más que las bolas de arroz normales.
Un comensal que probó el manjar de las axilas dijo que no sabía diferente.
Algunos restaurantes demuestran abiertamente el proceso, promocionando con orgullo a sus chefs estrella y su técnica única al permitir que los clientes visiten la cocina; curiosamente, los estudiosos han investigado el significado sexual de las axilas.
Los académicos han opinado sobre las implicaciones culturales y fisiológicas de este fenómeno. Una investigación de 2013 profundiza en el significado único de las axilas, sugiriendo que el sudor de esta área contiene feromonas que pueden afectar las emociones humanas cuando se sienten o se saborean.
Sin embargo, no todo el mundo está convencido de la idea. La novedad ha provocado acalorados debates en las plataformas de redes sociales. Mientras que los defensores argumentan que mientras se respeten los estándares de higiene, no hay nada de malo en explorar los límites culinarios, los escépticos expresan su preocupación por los posibles riesgos para la salud asociados con este método de preparación poco ortodoxo.
"Estas bolas de arroz pueden satisfacer los deseos tabú de algunas personas, siempre y cuando sean higiénicas, no hacen daño", dijo una persona. “Es inaceptable. ¿Qué pasa si el chef tiene una enfermedad oculta? Prefiero comer bolas de arroz normales”, escribió otro.
A medida que se desarrollan las discusiones en línea, el panorama culinario de Japón continúa ofreciendo una variedad de platos intrigantes y poco convencionales. Desde el famoso natto, un plato de soja fermentada famoso por su aroma picante y textura pegajosa, hasta el pastel de gotas de lluvia que desafía las convenciones de postres tradicionales, la cocina japonesa sigue siendo un campo de innovación y sorpresa.
